Desigualdad social y educación: estudiantes indígenas de la Preparatoria Agrícola

 de la Universidad Autónoma Chapingo

Social inequality and education: indigenous students of the Agricultural Preparatory School

 in the Autonomous University of Chapingo

María del Carmen Pérez-Samaniego

cameli90sam@gmail.com

Gladys Martínez-Gómez

gladysmartinezgomez@gmail.com

Universidad Autónoma Chapingo, México.

Educación y Sociedad

Vol. 17, No.3, Septiembre-Diciembre de 2019 (134-148)

ISSN: 1811- 9034 RNPS: 2073

Artículo derivado de una investigación sobre el conjunto de la generación de ingreso a la Preparatoria Agrícola de la UACh, 2010.

Recibido: 16 de mayo de 2019

Aprobado: 26 de junio de 2019

Publicado: 4 de septiembre de 2019

 

Resumen

Este estudio surge de uno más amplio sobre seguimiento a estudiantes de la Preparatoria Agrícola de la Universidad Autónoma Chapingo UACh, generación 2010. Para este análisis se construyó una base de datos donde se ubicaron sus trayectorias escolares: normal, de rezago y de abandono. Este análisis vincula las trayectorias con los datos socioeconómicos, lugar de procedencia, pertenencia a un grupo indígena, manejo de una lengua nacional, grado de marginación y tamaño de la localidad. El objetivo del artículo es mostrar la relación entre el tipo de trayectoria escolar con las variables antes señaladas que genera procesos de exclusión originados por la desigualdad social, lo que demuestra la necesidad de una atención psico-pedagógica en la Universidad.

Palabras clave: abandono de estudios, desigualdad social, trayectoria escolar

Abstract

This study is part of another about follow-up to students of the Agricultural Preparatory School of the UACh, generation 2010. For this analysis, a database was constructed where students’ progresses were located based on three categories: normal, lag and desertion. This analysis links progresses with socio-economic data, place of origin, belonging to an indigenous group, management of a national language, degree of marginalization and size of the locality. The objective of this paper is to show the relationship between the type of school progress with the aforementioned variables that generates processes of exclusion caused by social inequality, which demonstrates the need for psycho-pedagogical attention in the university.

Keywords: indigenous, inequality, progress, school, students

Introducción

Esta investigación diagnóstica es parte de un estudio más amplio sobre seguimiento a los estudiantes de la generación 2010 de la Preparatoria Agrícola de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh). En una base de datos se dio seguimiento a cada estudiante durante los tres años de Preparatoria y se encontraron las siguiente trayectorias: la normal durante los tres ciclos; la de rezago que desapareció un ciclo o dos y reapareció posteriormente; y la de abandono, que no volvió a aparecer en ningún ciclo o reapareció en primero o segundo año para desaparecer nuevamente.

El análisis implicó vincular las trayectorias escolares con información de los datos socioeconómicos recuperados  por el Departamento de Estudios Técnicos de la Unidad de Planeación, Organización y Métodos (UPOM) de la UACh durante 2010. Las trayectorias se relacionaron con el grado de marginación y tamaño de la localidad de la cual provenían los jóvenes. Para el análisis de la marginación se consideró la tipología realizada por el Consejo Nacional de Población (CONAPO); y para el tamaño de la localidad, la establecida por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), con algunas referencias de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT). Conocer la diversidad social, cultural y económica de los jóvenes que ingresan y su relación con las trayectorias escolares permite que la institución cumpla de manera eficiente su función psico-pedagógica de acuerdo a los objetivos universitarios asentados en el Estatuto Universitario a fin de disminuir la exclusión producto de la desigualdad social.

El artículo está dividido tres apartados: en el primero se describen a los jóvenes de escasos recursos que provienen del sector rural y comunidades indígenas; en el segundo se presentan las desigualdades de los estudiantes indígenas; y en el tercero las trayectorias académicas de estos estudiantes y finalmente se establecer algunas conclusiones.  

Desarrollo

Jóvenes de escasos recursos del sector rural: una prioridad para la UACh

Como institución dedicada a la formación de expertos agrícolas, la UACh, no sólo asume el compromiso de atender a los jóvenes, sino de apoyar a aquellos que provienen del sector rural y son de escasos recursos económicos, como bien lo señala el Estatuto Universitario en su artículo 132: "Para la selección de los alumnos se dará preferencia a los solicitantes de escasos recursos económicos y provenientes del sector rural, tomando en cuenta la calificación obtenida en el examen de admisión.” (UACh, 1977).

Con la finalidad de instrumentar esta política, a partir de 2008, se definieron estrategias avaladas por el Honorable Consejo Universitario para brindar mayor atención al ingreso de los jóvenes de origen indígena y el establecer criterios para el ingreso de un número mayor de jóvenes procedentes de municipios de alta y muy alta marginación, de etnias, de escuelas agrícolas y de todas las entidades federativas. Estas propuestas se generaron bajo el principio de inclusión social a fin de contrarrestar  la desigualdad social.

La educación, como fenómeno social, se encuentra inmersa en el contexto de la desigualdad social como proceso de exclusión (Jiménez, Luengo & Taberner, 2009) que coloca a los individuos en diferentes espacios territoriales, simbólicos y de vida, que les posibilitan disposiciones diferenciadas en la obtención de bienes materiales y culturales, entre ellos los educativos. Exclusión significa negarles la posibilidad de adquirir un bien, un lugar, un beneficio, un servicio que, en condiciones normales, les correspondería, pero en esas circunstancias tienen poca o ninguna posibilidad de elegir, de ejercer su libertad (Dieterlen, 2008). La exclusión social implica rechazo, violencia y negación de los derechos más elementales relacionados con sus propia existencia como personas, familias o comunidades enteras (Fuentes, 2008)

Esta violencia es más evidente en las clases más bajas, en los excluidos, quienes no sólo tienen menores ingresos económicos, menores posibilidades de desarrollo, sino que también son portadores de un capital cultural y social que no siempre favorece lo escolar (Bourdieu & Passeron, 1996) lo cual se refleja en trayectorias escolares problemáticas, caracterizadas por un menor rendimiento académico o éxito escolar.

Algunos estudios (Bourdieu & Passeron, 1996; Hernández, Márquez & Palomar 2006; Muñoz, 2009; Villa, 2007) señalan una relación directa entre el desempeño escolar y variables como el ingreso económico, la escolaridad de los padres, el capital cultural, el género, entre otros. Por ejemplo, a mayor ingreso, aumenta el acceso a la educación superior, a mayor escolaridad de los padres, mayor ingreso al sistema educativo y aumenta la probabilidad de una trayectoria exitosa. De igual manera, refieren una condición estructural de menor acceso a la educación para las mujeres, para los jóvenes del medio rural y en particular para los indígenas. No pretendemos con ello establecer una relación determinista, en todo caso los trabajos establecen relaciones que se repiten, prefigurando una tendencia donde la desigualdad social parece ser el marco que mejor explica las diferencias en el desempeño escolar.

La desigualdad en los estudiantes indígenas

En este contexto de desigualdad, la pertenencia a un grupo étnico es un factor de reproducción y profundización de la desigualdad que se acentúa con las brechas de género entre hombres y  mujeres indígenas (Yanes, 2008) y otros factores como el ingreso y la escolaridad. Los indígenas son de los grupos sociales más excluidos, sus precarias condiciones de vida determinan su  capital cultural y social que puede influir en su éxito escolar.

En la UACh, los alumnos que se reconocen de ascendencia indígena son una población creciente, cercana a la tercera parte (29.6 %) de los estudiantes que ingresaron a la Preparatoria Agrícola en 2010 y suman 335 jóvenes provenientes de 17 grupos étnicos (tabla 1) donde sobresalen los mixtecos, zapotecos y los náhuatl, grupos que representan la mitad de la población indígena en la universidad.

La mitad de los jóvenes indígenas (53%) reporta que hablan su lengua materna (tabla 1), esta condición le brinda a la Universidad un factor de alta potencialidad cultural, pero también desde la perspectiva académica y de sentido social. Por lo menos la mitad de los jóvenes de los siguientes grupos étnicos nos dice ser hablantes de su lengua materna: Otomí, Zapoteco, Tzotzil, Náhuatl, Tzeltal, Mazatleco, Maya, Totonaco, Chinanteco, Mixe y Chol.

Tabla 1. Alumnos indígenas por grupo étnico y que hablan una lengua ( Generación 2010)

Grupo

Alumnos

%

Hablan su lengua natal

%

Otomí

12

3.6

6

50

Tojolabal

2

0.6

0

0

Zapoteco

57

17.0

38

66.7

Tzotzil

18

5.4

12

66.7

Náhuatl

56

16.7

33

58.9

Tzeltal

4

1.2

4

100

Mixteco

61

18.2

25

41.0

Mazatleco

3

0.9

3

100

Mazahua

8

2.4

1

12.5

Maya

2

0.6

1

50

Totonaco

31

9.3

21

67.7

Purépecha

3

0.9

1

33.3

Huasteco

1

0.3

1

100

Chinanteco

7

2.1

6

85.7

Mixe

21

6.3

18

85.7

Chol

7

2.1

7

100

Zoque

2

0.6

0

0

Otra

34

10.1

0

0

Sin dato

6

1.8

0

0

Total general

335

100.0

177

52.8

Fuente: Elaboración a partir del Estudio de Perfil de ingreso 2010 y la base de datos de alumnos inscritos en primer año en la Preparatoria Agrícola de la UACh, ciclo 2010- 2011.

En la población de la UACh, los indígenas son el grupo de más alta marginación, se observó que del total de 335 jóvenes, 258 provienen de localidades de alta marginación y representan más de las tres cuartas partes del ingreso de los indígenas en la generación que nos ocupa, apenas el 3% del total son de muy alta marginación (Gráfico 1).

El bajo ingreso de jóvenes de localidades de muy alta marginación, pone el acento en las escasas oportunidades que tienen para estudiar los más pobres entre los pobres, los grupos más vulnerables y excluidos de la sociedad. También puede pensarse que la operación de la política de ingreso no alcanza a llegar a estas zonas, habrá que corroborar esta suposición en otro momento, por ahora, el análisis sólo se centra en revisar estos datos donde se descarta que de los 14 alumnos que ingresaron y provienen de muy alta marginación, diez se declaran ser indígenas, lo que representa el 71%.


Fuente: Elaboración a partir del Estudio de Perfil de Ingreso 2010 y la base de datos de alumnos inscritos en primer año en la Preparatoria Agrícola de la UACh ciclo 2010-2011

La marginación y el tamaño de sus localidades (tabla 2), dimensionan la realidad económica, social y cultural del medio en que han vivido su infancia y su adolescencia. Nos remitimos al hecho de que provenir de estas localidades, implica contar con condiciones materiales de mucho menor aprovisionamiento en servicios de salud y servicios (luz, agua, drenaje) al igual que de infraestructura cultural y recreativa. También puede pensarse en lo que implica para un adolescente que ha vivido en tales condiciones, confrontarse a sus 15 años, incluso menos, con el espacio institucional y de cultura escolar que significa la UACh.

De acuerdo con los datos de la tabla 2, el 52% de los alumnos indígenas provienen de localidades de menos de 2 500 habitantes, esto es, localidades pequeñas y eminentemente rurales. Si agregamos a los alumnos cuya localidad va de más de 2 500 habitantes a menos de 15 000, el porcentaje incrementa al 85%. Apenas el 12% habita en localidades de más de 15 000 habitantes, es decir urbanas.

Tabla 2. Tamaño y marginación de las localidades de origen de los alumnos indígenas. Generación 2010*

Tamaño de población (Semarnat)

muy bajo

%

bajo

%

medio

%

Alto

%

Muy alto

%

Total

%

menos de 500

0

0.00

3

16.7

3

9.4

54

20.7

2

20.0

62

18.6

501- 1500

0

0.00

2

11.1

1

3.1

84

32.2

3

30.0

90

27.0

1501- 2500

0

0.00

2

11.1

1

3.1

37

14.2

2

20.0

42

12.6

2501- 5000

1

8.33

2

11.1

4

12.5

55

21.1

3

30.0

65

19.5

5001-15000

0

0.00

0

0.0

9

28.1

15

5.7

0

0.0

24

7.2

15001-100000

2

16.67

4

22.2

9

28.1

7

2.7

0

0.0

22

6.6

100001-un millón

6

50.00

5

27.8

3

9.4

0

0.0

0

0.0

14

4.2

más de un millón

3

25.00

0

0.0

 

0.0

0

0.0

0

0.0

3

0.9

sin dato

0

0.00

0

0.0

2

6.3

9

3.4

 

0.0

11

3.3

Total

12

100

18

100

32

100

261

100

10

100

333

100

* Faltan 2 alumnos de los que no se tiene dato de marginación y tamaño de localidad

Fuente: Elaboración a partir del Estudio de Perfil de Ingreso 2010 y la base de datos de alumnos inscritos en primer año en la Preparatoria Agrícola de la UACh, ciclo 2010- 2011.

 

Si se observan los datos del tamaño de las localidades al interior de cada grado de marginación, se encuentra que apenas 12 alumnos indígenas, --que son el 3.6% del total de 335 indígenas--, proceden de localidades de muy baja marginación y que son urbanas, es decir son ciudades pequeñas, medianas o grandes. A medida que la marginación va en aumento, el tamaño de las localidades se va diversificando, encontrando localidades prácticamente de todos los tamaños, desde localidades rurales, semirurales y urbanas.

En el conjunto de localidades de alta marginación, de donde provienen 261 (78%) de los 335 indígenas, son en un 67% hasta de 2 500 habitantes, otro 27% es mayor a 2 500 y hasta 15 000 habitantes. Se puede afirmar entonces que el 94% de los indígenas que viven en localidades de alta marginación provienen del medio rural. Respecto a los alumnos cuya localidad es de muy alta marginación, siete de ellos viven en localidades pequeñas, de hasta 2 500 habitantes y otros tres alumnos en localidades de más de 2 500 y menos de 5 000 habitantes. Asimismo se observan diferencias según el género pues se observa la siguiente tendencia: 39% mujeres (129) y 61% hombres (206) (tabla 3).

Tabla 3. Alumnos indígenas de primer ingreso según sexo y grado de marginación, Generación 2010

Grado de Marginación

Hombres

%

Mujeres

%

Total

%

Muy bajo

6

50.0

6

50.0

12

100

Bajo

11

61.1

7

38.9

18

100

Medio

22

68.8

10

31.3

32

100

Alto

158

60.5

103

39.5

261

100

Muy alto

8

80.0

2

20.0

10

100

Sin dato

1

50.0

1

50.0

2

100

Total

206

61.5

129

38.5

335

100

Fuente: Elaboración a partir del Estudio de Perfil de Ingreso 2010 y la base de datos de alumnos inscritos en primer año en la Preparatoria Agrícola de la UACh, ciclo 2010- 2011.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Si bien es sabido que la proporción de mujeres que ingresa a la UACh es menor al ingreso masculino, puede explicarse porque la agronomía es un área de conocimiento que ha sido predominante masculina. Sin embargo, el hecho de que en el caso del ingreso indígena proveniente de muy alta marginación la proporción de mujeres sea bastante menor, apenas el 20%, lo que nos remite a interrogantes sobre una mayor desventaja de las mujeres en zonas más atrasadas.

Es relevante el hecho de que del ingreso total a la UACh, la proporción que proviene de telesecundarias es proporcionalmente más alta que el dato a nivel nacional. De los alumnos indígenas, el 39% estudió en una telesecundaria y 42% en secundaria técnica, apenas el 18% indica que estudió en secundaria general (Gráfica 2). Los estudios revisados han mostrado un menor desempeño en telesecundaria, obteniendo menores calificaciones en los exámenes tipo CENEVAL (Hernández, Márquez & Palomar, 2006).


Fuente: Elaboración a partir del Estudio de Perfil de Ingreso 2010 y la base de datos de alumnos inscritos en primer año en la Preparatoria Agrícola de la UACh ciclo 2010-2011.

Alumnos indígenas: su trayectoria académica en la Preparatoria Agrícola de la UACh


Analizando las trayectorias de los estudiantes se observa que para este grupo de alumnos, la trayectoria regular que concluye en los tres años la cubrieron el 57%, en tanto que el 5% lo hizo en un periodo mayor, es decir, con rezago. El abandono implicó que el 38% de ellos, no concluyera sus estudios (gráfica 3). Nos parece significativo comparar la trayectoria de este grupo de alumnos con aquellos que no pertenecen a ningún grupo indígena, pretendiendo comprender mejor la dinámica escolar a partir de ciertos contextos socioeconómicos y culturales.

Fuente: Elaboración a partir del Estudio de Perfil de Ingreso 2010 y la Base de Datos de Alumnos

Inscritos en primer año en la Preparatoria Agrícola de la UACh ciclo 2010-2011.

Líneas arriba, corroboramos que el grupo de jóvenes con ascendencia indígena tiene condiciones más limitadas. Provienen en su mayoría de localidades de alta y muy alta marginación, caracterizándose como rurales, la escolaridad de sus padres es de nivel bajo, un porcentaje mayor estudió en una telesecundaria.

La gráfica 4 cuestiona justamente sobre estos contextos, evidentemente hay un porcentaje menor en la trayectoria regular para los estudiantes indígenas y mayor en el abandono de sólo dos puntos porcentuales, sin diferencia en la trayectoria de rezago.


Fuente: Elaboración a partir del Estudio de Perfil de Ingreso 2010 y la base de datos de alumnos inscritos en primer año en la Preparatoria Agrícola de la UACh ciclo 2010-2011.

 Los alumnos indígenas tienen un comportamiento donde el porcentaje más bajo de trayectoria regular fue para los jóvenes de mediana marginación, pero es el porcentaje más alto de abandono (53.3%). Para los alumnos de muy baja, baja y alta marginación, la trayectoria regular va entre 57% y 61%. Salta a la vista que los jóvenes de muy alta marginación mostraron un porcentaje mayor en la trayectoria regular, el 80% (gráfica 5). La respuesta se antoja compleja.

Fuente: Elaboración a partir del Estudio de Perfil de Ingreso 2010 y la base de datos de alumnos inscritos en primer año en la Preparatoria Agrícola de la UACh ciclo 2010-2011.

Fuente: Elaboración a partir del Estudio de Perfil de Ingreso 2010 y la base de datos de alumnos inscritos en primer año en la Preparatoria Agrícola de la UACh ciclo 2010-2011


Al observar los datos que corresponden a mujeres y hombres, se evidencia que ellas se mantienen en una proporción mayor como alumnas regulares, diez puntos porcentuales más que los hombres y su abandono es menor (gráfica 6). La mayor permanencia de las mujeres respecto a los varones, ha sido señalada en otros estudios, por ejemplo, Inmujeres (2013) señala que si bien las mujeres muestran condiciones estructurales de mayor desigualdad y menor acceso a la educación, una vez que logran ingresar, presentan un mayor aprovechamiento escolar y mayor permanencia.

La procedencia rural de los jóvenes indígenas es incuestionable, mientras que del total de la generación el 54% de quienes ingresaron en 2010, proviene de localidades muy depauperadas, de alta y muy alta marginación y con menos de 5000 habitantes, el 78% de los indígenas proviene de este tipo de localidades, donde el peso de la actividad agropecuaria es importante y que cuentan con escasa infraestructura en servicios y de acceso a la cultura, sólo el 10% de los alumnos indígenas vive en localidades de muy baja o baja marginación.

La evidencia es que los alumnos indígenas obtuvieron en dos puntos porcentuales menos, 57% contra 59% una trayectoria regular respecto a los alumnos no indígenas. Los alumnos que han cursado una secundaria general mostraron también una proporción ligeramente mayor en la trayectoria regular, alrededor de cuatro puntos porcentuales más, que quienes cursaron secundaria técnica o telesecundaria. Abordar el estudio del desempeño escolar de los estudiantes en Chapingo, remite a profundizar en los contextos y su complejidad, por algo los estudios indican que para la población pobre de este país se ha estructurado también una educación pauperizada (Muñoz, 2009). Las condiciones estructurales que caracterizan el contexto familiar y de la localidad en la que se han desarrollado los jóvenes que ingresan son de especial relevancia en la comprensión de su diversidad.

Conclusiones

Evidentemente este trabajo más que respuestas genera preguntas. ¿Podemos confirmar que los alumnos indígenas en la UACh, siendo jóvenes con mayor vulnerabilidad social logran un desempeño similar a los no indígenas? En todo caso, es necesario el estudio de otras generaciones y abordar el tema desde diversas perspectivas para aproximarnos a algunas respuestas.

Lo que sí es evidente es que a pesar de las declaraciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU, 2000) asentadas en la Declaración del Milenio de promover en los Estados la justicia, así como el respeto a la igualdad sin distinción de raza, sexo, idioma o religión, en los hechos se observa que las brechas económicas conllevan una diversidad de fenómenos sociales como la exclusión, la segregación y la desigualdad en todos los aspectos. La desigualdad no es una sola, existen un conjunto de desigualdades en las que se acumulan y yuxtaponen las relaciones de exclusión, de manera muy destacada por pertenencia étnica y roles de género (Yanes, 2008).

Creemos que este trabajo aporta algunos elementos para fundamentar la importancia del modelo educativo de Chapingo y su mejora. Por ello, ante esta información, surge el supuesto de que el modelo académico de la UACh, con sus apoyos asistenciales, logra generar condiciones que aminora las desventajas de los jóvenes en situaciones estructurales limitadas, dando mayores posibilidades para que los jóvenes de bajos recursos y del medio rural superen rezagos y logren afrontar las exigencias académicas de la Preparatoria Agrícola. Si partimos de que el embudo se estrecha conforme avanza el nivel escolar, es decir, las posibilidades de acceso de los sectores más vulnerables disminuyen en los niveles educativos más altos, supone esto la necesidad de un análisis más detallado del modelo de la UACh.

Por otra parte, no se debe pasar por alto que a pesar de los esfuerzos de los jóvenes en concluir sus estudios universitarios, así como sus deseos de cambio, de movilidad y ascenso social, éstos provienen de condiciones estructurales de mayor rezago, llenas de carencias históricas que al enfrentarse a un proceso escolar de alta dificultad como es el de la UACh, puede dar pauta a una pérdida de la esperanza (Castillo, 2008) sobre todo para aquellos que se encuentran en situaciones de rezago y abandono escolar.

Por ello, resulta interesante indagar sobre cómo la institución asume esta diversidad y complejidad, y por otro lado, se vislumbra la necesidad de impulsar estrategias psico-pedagógicas, que aun cuando se reconozca el peso de los factores extraescolares en el desempeño escolar, se defina como política institucional la creación de factores internos a la institución que contrarresten dicha influencia (Muñoz, 2009). Otra definición institucional que hay que precisar, está en concebir los múltiples espacios institucionales como espacios de vida, de convivencia y de integración del sujeto, para que en estos tiempos difíciles, la escuela, la Universidad, sea la contraescuela de la violencia, la corrupción, el despojo y  la desigualdad, entre otros.

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