CIEGO DE ÁVILA, CAPITAL DE LA LOCUCIÓN CUBANA. VALIDACIÓN DE UN NOMBRAMIENTO
CIEGO DE ÁVILA, CUBAN LOCUTION CAPITAL. A DESIGNATION VALIDITY
Autora: Sayli Sosa Barceló
Institución: Periódico Invasor
Correo electrónico: saylisosab@gmail.com
RESUMEN
Este artículo presenta la validación del nombramiento de la ciudad de Ciego de Ávila como Capital de la Locución cubana a partir de rasgos socioeconómicos, culturales y lingüísticos distintivos del territorio. La investigación se propone sistematizar la producción teórica sobre locución e identificar y caracterizar las etapas más importantes del desarrollo de la locución, mediante la reconstrucción histórica del surgimiento y consolidación de la radio y la televisión en Ciego de Ávila. El estudio empleó la revisión bibliográfica y las entrevistas semiestructuradas a locutores, radialistas y directivos del Instituto Cubano de Radio y Televisión.
Palabras clave: Locución, Ciego de Ávila, Capital de la Locución cubana.
ABSTRACT
This article presents the validation of Ciego de Ávila as the Capital of the Cuban Locution, based on the socioeconomic, cultural and linguistic characteristics of the territory. The research intends to systematize the theoretical production about locution and identify and characterize the most important stages of the locution´s development, through the writing of radio and television´s history in Ciego de Ávila. The study used the literature review and semi-structured interviews with broadcasters, radiographers and directors of the Cuban Institute of Radio and Television.
Keywords: Broadcasting, Ciego de Ávila, Capital of Cuban Locution.
INTRODUCCIÓN
Cuando el 22 de agosto de 1922 el cielo habanero fue saludado por el sonido de la 2LC, nació, también, vinculada a la rica historia de la radio cubana, la profesión que durante más de ochenta años ha dotado de una personalidad y vitalidad muy propias a la programación de cada emisora: la locución.
Así describe Bracero (2003) el surgimiento y consolidación en Cuba de la locución como práctica comunicativa indisolublemente ligada al desarrollo de los medios de comunicación audiovisuales. Cuando se piensa en la producción de estos medios, ya sea periodística o de entretenimiento, se tiende a identificar con la persona que lee y presenta las noticias o con quien conduce programas. Locutores, presentadores, animadores y conductores son la cara más visible del entramado mediático contemporáneo.
Los estudios también demuestran que aunque alguien nos guste al principio, la atracción puede desaparecer enseguida por su forma de comunicación, especialmente a causa de su voz, porque lo más importante no es lo que alguien dice sino cómo lo dice (Glass, 1994 en Rodero, 2001: 1).
Las investigaciones en el campo de la Comunicación de Masas han insistido en el análisis del mensaje y la recepción, dos de los componentes del esquema clásico Emisor-Mensaje-Receptor. Los estudios de emisores donde se incluirían las prácticas comunicativas vinculadas a la locución, apunta Mena (2017), se inician durante la segunda década del siglo XX, como aproximaciones empíricas y enfocadas, fundamentalmente, hacia la producción periodística.
La producción científica en torno a la locución tiene un nodo destacado en España, con Enma Rodero entre las más prolíficas autoras. La experta ha estudiado la Locución radiofónica en general (2003), la correcta locución en los informativos televisivos (2007), las cualidades acústicas de la voz (tono, timbre, intensidad, duración) (2011) y la entonación en los informativos radiofónicos (2013), por solo citar algunos, y ha demostrado que en los mensajes audiovisuales, la percepción y comprensión de la audiencia está determinada no sólo por el contenido sino especialmente por la forma de presentación. El manejo de la voz, como instrumento principal de transmisión del contenido explícito del texto, transporta toda la carga del sentido, así como la dimensión afectiva del mismo.
Además, ha descrito cómo los receptores perciben las variaciones de la voz en los profesionales de la radio y la televisión y cómo son capaces de valorar qué aspectos les parecen positivos o negativos, estableciendo unos parámetros socialmente más aceptados, que pueden servir de base para el aprendizaje de los profesionales.
En Cuba, el estudio más completo sobre la locución data de la década del 80 del siglo XX. Frank Guevara (1984) sistematizó los presupuestos teóricos y prácticos en su libro Locución: técnica y práctica. La ausencia de investigaciones más recientes plantea el reto de llenar ese vacío de conocimiento.
El 1ro. de noviembre de 2003, la Unión de Escritores y Artistas de Cuba y el Instituto Cubano de Radio y Televisión, en acto público, decidieron declarar a la provincia de Ciego de Ávila como Capital de la Locución Cubana, atendiendo a un acuerdo tomado por la Cátedra de Locución del Instituto Cubano de Radio y Televisión una década antes.
Entre las razones para este nombramiento se destacó la gran cantidad de buenos locutores que surgieron y se desarrollaron en la ciudad avileña antes de alcanzar planos nacionales, además del temprano desarrollo de la radio en Ciego de Ávila y las características del habla de los habitantes de esta región del país.
No existe en Ciego de Ávila, un estudio que, desde la teoría, la historiografía o la empírica reconstruya el devenir de la profesión y sus rasgos distintivos ni la validación del nombramiento.
De ahí que este trabajo se proponga revisar los presupuestos teóricos de la locución como práctica comunicativa, sistematizar los principales períodos del desarrollo de la locución en Ciego de Ávila e identificar los rasgos culturales, históricos, socioeconómicos y comunicológicos que validan el nombramiento de la ciudad de Ciego de Ávila como Capital de la Locución cubana.
MATERIALES Y MÉTODOS
La investigación se apoya en una perspectiva metodológica cualitativa, en tanto posibilita la «construcción del conocimiento como un proceso abierto, orientado en todo momento hacia formas más complejas de comprender el fenómeno estudiado» (Saladrigas y Alonso, 2002: 34).
La Investigación bibliográfica documental incluyó documentos escritos primarios y secundarios. Se revisaron libros, revistas, folletos, publicaciones periódicas y otros documentos impresos. Además, se consultó bibliografía digital, documentos en línea y tesis en opción al grado de licenciatura y maestría relacionadas con el objeto de estudio. También se estudió documentos sonoros (archivos digitales de locutores).
Además, arrojó información que fue utilizada en la elaboración del marco teórico y referencial. Los textos Locución: Técnica y Práctica, de Frank Guevara, y la producción científica de Emma Rodero aportaron datos imprescindibles para abordar la locución desde una arista más teórica que práctica y alejarnos de la concepción de manual tan difundida.
Asimismo, la obra La Radio en Cuba de Oscar Luis López (2002) fue material básico, al constituir el único estudio de este tipo que se haya realizado en Cuba hasta la fecha. La descripción detallada de la introducción y desarrollo de la radio permitió hacer una construcción paralela sobre la locución en Cuba y los locutores más importantes de cada época.
También se revisó reportes de prensa, de distintos períodos históricos, y el texto Historia Local de la Provincia de Ciego de Ávila: 1898-1970 a fin de reconstruir el contexto económico, social y cultural avileño.
Para identificar los rasgos distintivos de la variante del idioma español hablada en la región central de Cuba, donde se ubica geográficamente Ciego de Ávila, se tomó en cuenta las investigaciones realizadas por un colectivo de autores entre 1989 y 1995 que tributaron, posteriormente, a la conformación del Atlas Lingüístico de Cuba (2013).
Entrevistas en profundidad a 10 locutores avileños de diferentes generaciones, residentes en Ciego de Ávila y La Habana, que permitieron caracterizar el desarrollo de la locución avileña partiendo de la experiencia personal de cada uno. Se buscó obtener una descripción de los factores que más incidieron en el desarrollo de la locución en Ciego de Ávila. Las entrevistas se grabaron en formato digital y luego fueron transcritas. También se entrevistó a radialistas y directivos del Instituto Cubano de Radio y Televisión.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Si bien locución es la acción y el modo de hablar y expresarse oralmente, según el Diccionario de la Lengua Española de la Real Academia Española, lo cual entraña una cualidad compartida por todos los seres humanos, el propio diccionario define al locutor/a como la persona cuyo oficio es «hablar por radio y televisión para dar noticias, presentar programas, entre otros» (23. ª Edición). Esto quiere decir que no se concibe la práctica comunicativa sin los medios audiovisuales y no se puede construir su historia sin tomar como punto de partida tal desarrollo de la infraestructura tecnológica.
Los acercamientos a la locución han llegado desde la Lingüística y la Prosodia (Johnson, 1997; Stevens, 1998; Collins y Mees, 2003), varios autores han estudiado el origen y los elementos formativos de la locución radiofónica y televisiva (Larrea, 2014; Rodero, 2007; Pérez y Merayo, 2001; Polo de Guinea y Montesdeoca, 1995; Camargo, 1998; Guevara, 1984). Hay consenso en que locución no es solo leer o hablar, sino comunicar, hacer partícipe de sentidos al Otro.
También hay coincidencias en considerar como la principal herramienta de un locutor a la voz (en la televisión se conjugan, además, códigos visuales, pero la voz mantiene su importancia). «El manejo de la voz, como instrumento principal de transmisión del contenido explícito del texto, transporta toda la carga del sentido, así como la dimensión afectiva del mismo» (Rodero, 2007:524).
De la misma manera que no hay dos huellas dactilares iguales, no hay dos voces idénticas. Cada voz tiene un matiz propio e inimitable, que es lo que la hace única, una serie de características que la diferencian de las demás. Si bien es cierto que las voces se pueden imitar, la emulación nunca llegará a ser exactamente igual que el modelo imitado. Estas cualidades son la intensidad, el tono y el timbre, aunque hay algunos autores, como Emma Rodero (2003:41) Carmen Pérez y Arturo Merayo (2001:79), que incluyen «la duración» como una cuarta cualidad en esta clasificación. (González, 2006: 4)
De locutores nacidos en Ciego de Ávila con voces radiofónicas relevantes y una notable carrera profesional se puede elaborar una lista que ya alcanza el centenar. Esa, precisamente, fue una de las razones para que en abril de 1993, durante el Primer Encuentro Nacional de la Cátedra de Locución del Instituto Cubano de Radio y Televisión, se acordara nombrar a Ciego de Ávila como Capital de la Locución cubana, aunque la institucionalización de tal título no se materializó hasta una década después.
El acta del encuentro, redactada y preservada por el ya fallecido locutor Héctor de Soto García, entonces Secretario de la Cátedra de Locución, lista los argumentos:
Primero: Este es el lugar de Cuba, según manifiestan los estudios realizados, donde mejor se habla el idioma castellano, no teniendo la mayoría de sus habitantes afectaciones que contradigan este concepto.
Segundo: El Día del Locutor, a celebrarse el primero de diciembre de cada año, tanto nacional como internacionalmente, fue instituido en homenaje a una figura de esta ciudad que dio elegancia y personalidad al arte de comunicar: Jorge Luis Nieto.
Tercero: Ha sido Ciego de Ávila, y lo continúa siendo con su relevo valioso y continuado, el centro de la locución nacional.
Cuarto: Estamos adjuntando sin un orden cronológico los nombres de 69 locutores, unos fallecidos, otros fuera del país y otros en servicio activo, que constituyen hasta ahora la historia de esta labor.
Quinto: También fue Ciego de Ávila, el 10 de octubre del año 1922, exactamente en el día de la Inauguración Oficial de la Radio Cubana, sede de quien reportó la primera transmisión de la emisora PWX de la Cuban Telephone Company, desde Ciudad de La Habana, según consta en la prensa escrita de esa época.
Sexto: Al cumplirse 70 años de la inauguración de la Radio Nacional, Ciego de Ávila puede enorgullecerse de haber tenido la emisora 7BY como pionera de esa actividad, el día 3 de febrero de 1924, y que hoy, junto a otras de Ciudad de La Habana y de otras provincias, recibe el reconocimiento y aplauso de un pueblo agradecido.
Pero, ¿cómo llegó Ciego de Ávila a convertirse en la Capital de la Locución cubana? ¿Tiene fundamento científico la argumentación de su nombramiento?
La investigación identificó tres rasgos socioeconómicos, culturales y lingüísticos que permiten validar la institucionalización de Ciego de Ávila como Capital de la Locución cubana.
1. Alto grado de desarrollo de la burguesía avileña
Al comenzar el siglo XX, Ciego de Ávila era solo un poblado en la provincia camagüeyana y aparecía en el mapa gracias a la famosa trocha militar española de Júcaro a Morón. Bastaron unos pocos años para que el Término Municipal avileño se expandiera, ampliara su geografía y creciera económica y socialmente en forma notable.
La introducción de capitales extranjeros, principalmente norteamericanos, impulsó sobremanera el desarrollo de la región en lugares como Ceballos. La mayoría de los centrales azucareros y las tierras para la producción de caña de azúcar estaban en manos de compañías estadounidenses. La burguesía no azucarera avileña estaba conformada en su mayoría por inmigrantes españoles, quienes hicieron progresar económicamente la sociedad de entonces.
La inauguración del ferrocarril Habana-Santiago, primero, y la carretera Central, después, fueron otros factores que aceleraron el crecimiento de Ciego de Ávila, al permitir el intercambio comercial y cultural con el resto del país. Muy pronto se construyeron en la ciudad lujosos edificios, clubes de reunión, hoteles, parques, teatros, cines, liceos. El capital financiero de esta burguesía se invirtió, también, en los medios de comunicación: diarios, revistas y emisoras de radio.
2. Una infraestructura avanzada en relación con la situación de la radio nacional
El propio 10 de octubre de 1922, cuando en la Ciudad de la Habana se estrenaba oficialmente la señal de radio, con la salida al aire de la emisora PWX, a más de cuatrocientos kilómetros de distancia, en el término municipal de Ciego de Ávila se daba el primer reporte de sintonía. La emisión se escuchó con tanta claridad que los avileños de aquella época bailaron al compás del danzón, y según Oscar Luis López (2002) fue esta la primera vez que se bailó en Cuba con música tomada de la radio.
Motivado tal vez por este incidente, el 3 de febrero de 1924 el Dr. Eduardo Valdés Figueroa inauguró en su propio negocio la primera estación de radio de Ciego de Ávila: la 7BY. Por varios años fue esta la única planta trasmisora de la ciudad, coincidiendo con el período de tanteo y experimentación que se produjo en todo el país, en relación con el nuevo medio de comunicación.
A partir de la década del 30 del siglo XX, se amplía el número de radioemisoras y ya en 1939 existían tres estaciones: CMJH, CMJI y CMJO. A pesar de no contar con los adelantos técnicos que poseían las plantas de la capital, la radiodifusión avileña se consolidó y logró mantener una programación variada e interesante.
Al igual que en La Habana, las principales casas comerciales del territorio se vincularon rápidamente al negocio radial, patrocinando programas, concursos o simplemente alquilando espacios para anuncios publicitarios. Las grandes empresas nacionales también colocaron sus menciones en la radio avileña, muestra de la importancia que tenía dentro de la región.
Con la consolidación del negocio radiofónico, la locución también fue ganando en experiencia y reconocimiento social. La siguiente década sería trascendental en el paso de anunciadores a locutores.
Hacia 1952 el desarrollo de la infraestructura radial en Ciego de Ávila permitió la inauguración de una nueva emisora. Radio Cuba ocupó de inmediato los primeros lugares de audiencia en el término municipal e incluso en la provincia camagüeyana. Otro de los logros de la emisora fue la preparación de locutores. Por sus cabinas pasaron los mejores valores del momento, algunos de ellos llegarían luego a los medios nacionales y pondrían en alto el prestigio de la locución avileña. Orlando Castellanos, Miguel Páez, Manolo Sariol, Roberto Aguilar, Eddy Martin, Héctor Rodríguez, entre otros, dan fe de ello.
Al triunfar la Revolución se reorganiza el sistema de medios en Cuba, razón por la cual Radio Cuba se convierte en Radio Surco, emisora provincial de Ciego de Ávila. Radio surco en conjunto con la emisora CMJX de Morón, también ha formado nuevos valores en el arte de la palabra: Laritza Ulloa, Rodobaldo Hernández, Andy Romo, Alberto Fernández Pena, entre tantos otros, han mantenido en alto el prestigio de la locución avileña.
3. Un contexto social e histórico favorable al buen hablar y la existencia de instituciones que promovieron las buenas maneras al decir.
Según el estudio realizado por un grupo de investigadores del Instituto de Literatura y Lingüística, entre 1989 y 1995 se llevó a cabo la aplicación del cuestionario del Atlas Lingüístico de Cuba en 11 de las 14 provincias del país y el municipio especial. Esta investigación se realizó en regiones urbanas y rurales, siempre con individuos que tuvieran nivel escolar inferior al noveno grado, oriundos de la zona y que no hubieran radicado fuera de la región. Se perseguía establecer una caracterización fonética, léxica y morfológica de la variante cubana del español.
Algunos de los datos que arrojó este análisis validan la tesis que afirma que Ciego de Ávila pertenece a una de las regiones donde mejor se habla la variante cubana del español. En el aspecto fonético, que es el que más tiene que ver con la locución, se estudiaron los fonemas s, r, y l, por ser los más estigmatizados por la Real Academia de la Lengua Española. Es decir, los fonemas de difícil pronunciación.
Atendiendo a este parámetro, más del 50 por ciento de los encuestados en la provincia mantenían las variantes prestigiosas del fonema s, a la vez que lo omiten y asimilan en menor cuantía en relación con otras regiones del país. Lo mismo sucede con el fonema r. La provincia posee elevado por ciento en la correcta pronunciación, al igual que la provincia de Camagüey. Por último, de acuerdo con la investigación, todos los avileños, camagüeyanos y tuneros encuestados pronunciaron correctamente la consonante líquida l.
Así, es correcto afirmar que la provincia Ciego de Ávila se encuentra en la región del país donde mejor se habla la variante cubana del español.
Según el testimonio de los entrevistados y los datos aportados por la investigación bibliográfica, en Ciego de Ávila, antes de 1959, existieron numerosos centros educacionales en los que se hacía hincapié en la correcta utilización del idioma español. Profesores de academias privadas, escuelas públicas, institutos, insistían en el buen uso del lenguaje y en la correcta pronunciación y entonación. Luego del triunfo revolucionario, este empeño se generalizó a todas las regiones del país.
CONCLUSIONES
Los estudios sobre locución han estado más centrados en el análisis de la técnica que en la construcción teórica sobre la práctica comunicativa y las competencias inherentes a los locutores. A nivel internacional, los principales aportes han llegado desde España, mientras que en Cuba apenas se ha investigado este campo. Los rasgos socioeconómicos, culturales y lingüísticos de Ciego de Ávila, entre los que sobresale el alto grado de desarrollo de la burguesía durante la etapa de surgimiento y consolidación de la radio, y por consecuencia la inversión en infraestructura y tecnología, además de un contexto geolingüístico favorable al buen habla y la existencia de instituciones que promovieron las buenas maneras al decir, contribuyeron a que la locución en Ciego de Ávila alcanzara un desarrollo de referencia nacional y valida su posterior nombramiento como Capital de la Locución.
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