Tori, C.; Jordan, L. y Arzola, L.

Los cambios generacionales en la identidad anglocaribeña …

Pág. 219-230

Recibido: 12/08/2022  Aceptado: 13/09/2022  Publicado: 30/09/2022

Universidad & ciencia

Vol. 11, No. 3, septiembre-diciembre (2022)

ISSN: 2227-2690 RNPS: 2450

https://revistas.unica.cu/uciencia/index.php

LOS CAMBIOS GENERACIONALES EN LA IDENTIDAD ANGLOCARIBEÑA DEL CONJUNTO LA CINTA Y SU EXPRESIÓN ARTÍSTICA

THE INFLUENCE OF GENERAL CHANGES OF THE ANGLO-CARIBBEAN IDENTITY OF FOLKLORE GROUP LA CINTA AND ITS ARTISTIC EXPRESSION

Autores: Caridad L. Tori Ramirez1

https://orcid.org/0000-0001-6314-8684

Leeubert Jordan Santana2

https://orcid.org/0000-0002-0657-131X

Lisset Arzola de la Rosa3

https://orcid.org/0000-0003-1574-9594

Institución: 1,3Universidad de Ciego de Ávila Máximo Gómez Báez, Cuba

2Empresa de servicios a la agroindustria azucarera, Cuba

Correo electrónico:

RESUMEN

El resultado que se presenta forma parte del proyecto “Identidad y realidad cubana: estudio sociocultural del impacto de las transformaciones socioeconómicas en el centro de Cuba”. Se realiza en respuesta a la preocupación de la comunidad anglocaribeña del municipio Baraguá por preservar sus valores culturales anglocaribeños, inherentes a la identidad de “La Cinta”, su legítimo representante cultural en Cuba. Se plantea el objetivo de identificar la influencia de los cambios generacionales en los factores de identidad de “La Cinta” y su expresión artística. La observación, la revisión de documentos y la entrevista como método para la obtención de la información, permitieron: establecer las relaciones entre: factores de identidad – percepción - expresión artística y develar las transformaciones en esta, solo percibidas por especialistas y conocedores de la cultura anglocaribeña, con la intención de alertar a los factores comunitarios que intervienen en el desarrollo y evolución del proyecto cultural, sobre la pérdida paulatina de su identidad y autenticidad.

Palabras clave: Antropología cultural, Factores de identidad, Identidad cultural.

ABSTRACT

The result presented here is part of the project “identity and Cuban reality”: Sociocultural studies of the impact of the socio-economic transformations in the central region of Cuba. It is done in response to the concern of the Anglo-Caribbean community of Baraguá municipality to reserve its anglo-caribbean cultural values, inherent in the identity of “La Cinta”, its cultural legitimate representative in Cuba. The objective is to identify the influence of general changes in the identity factors of “La Cinta” and its artistic expression. The observation, the document analysis and the interview as a method for obtaining information, allowed: to establish the relationships between the identity factors-perception-artistic expression and to reveal the transformations in this, just perceived by specialists and connoisseurs of the Anglo-Caribbean culture, with the intention of alerting the community factors that intervene in the development and evolution of the cultural project, about the gradual loss of its identity and authenticity.

Keywords: Cultural anthropology, Cultural identity, Identity factors.

INTRODUCCIÓN

La protección patrimonial de elementos inmateriales representativos de la identidad cultural de los pueblos potencia la diversidad cultural como elemento fundamental de convivencia. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) materializa una ambiciosa estrategia política que prevé cinco ejes de acción a considerar en la proyección de las políticas culturales. Dada la temática del presente estudio y su intencionalidad, se asumen los ejes referidos a la: “protección y conservación de los bienes inmuebles (…); la protección y promoción de la diversidad de las expresiones culturales (…) la integración del diálogo intercultural y la diversidad cultural”, para considerar en las reflexiones que se presentan.

La identidad cultural es una temática de evidente complejidad por las diferentes aristas a considerar en una investigación humanística, dada la diversidad de enfoques especializados en correspondencia con las diferentes ramas del saber y las interacciones entre los factores de identidad que intervienen en su conformación, asimilación y conservación (¿Cuáles son los factores que influyen en la identidad? (2020)). Según la UNESCO, la identidad cultural es “el sentimiento que experimentan los miembros de una colectividad que se reconocen en esa cultura y de no poder expresarse con fidelidad y desarrollarse plena y libremente si no es a partir de ella”, citado por Gómez Aguilera (2018), esta definición permite comprender la preocupación planteada por descendientes de la comunidad de inmigrantes procedentes de varias islas del Caribe anglófono, asentada en Cuba desde 1917 en el denominado Barrio Jamaicano del municipio Baraguá, referida a la necesidad de proteger los valores culturales que le aportan identidad al conjunto músico danzario “La Cinta”, su legítimo representante cultural en Cuba.

Se aborda el tema desde una perspectiva sociológica que permite identificar el conjunto de valores culturales, entendidos como factores de identidad del grupo social y su representación a través de la expresión artística de “La Cinta, cuya evolución y diversidad cultural actual se asume desde la antropología cultural que plantea el análisis de la evolución del conocimiento del ser humano por medio de su cultura, es decir, costumbres, mitos, creencias, normas y valores que guían el comportamiento del individuo como miembro de un grupo social (definición de Wikipedia, 2022). En este caso, la pertenencia al grupo se rige por el carácter representativo de la cultura que defienden sus integrantes, que no es la propia y sus características a partir de los cambios generacionales que se producen de manera natural.

Lo anterior se concreta en este estudio a partir de los criterios expuestos por Rodríguez, Juan J. (1989), Villarreal, (2000), Cassidy, F. (1961), Castellanos Jordán (2015) acerca de los diferentes factores de identidad de la comunidad jamaicana y la evolución histórica de “La Cinta”; las valoraciones de los informantes: Mariela Santana Cruz (Instructora de danza y metodóloga de Patrimonio Cultural Inmaterial de Cultura en Ciego de Ávila), Alonso Jordán (1931-2000), fundador, bailarín y director general del grupo), quien trasmitió sus experiencias y preocupaciones a Leeubert Jordán (coautor de este estudio), su nieto y bailarín no activo del grupo infantil y a los artistas descendientes James Willeston Phillips (bailarín y director), Iran Wentt (director musical), Francisco Gómez Ellis (músico e historiador del conjunto), Enma Parris (bailarina no activa).

El estudio se dirige a identificar los factores de la identidad anglocaribeña asumidos por “La Cinta”, cuyo reflejo artístico denota transformaciones bajo la influencia de los cambios generacionales que ocurren de forma natural en la composición del grupo y se reflejan en su expresión artística a través de la música, los cantos y las danzas desvirtuando la esencia identitaria y la autenticidad del producto artístico, aspectos solo perceptibles para los nativos, descendientes o conocedores de dicha cultura. De ahí que los autores, se planteen como objetivo: identificar la influencia de los cambios generaciones en la identidad anglocaribeños de “La Cinta” y su expresión artística.

Durante el estudio se emplearon métodos y técnicas de investigación como la observación, métodos teóricos, el análisis de documentos y la entrevista. Los resultados permitieron establecer las relaciones entre: factores de identidad - percepción - expresión artística y develar las transformaciones en esta, solo percibidas por especialistas y conocedores de la cultura anglocaribeña, con la intención de alertar a los factores comunitarios que intervienen en el desarrollo y evolución del proyecto cultural, sobre la pérdida paulatina de su identidad y autenticidad.

DESARROLLO

Antecedentes de la formación identitaria del conjunto músico danzario “La Cinta”

La formación y desarrollo de la comunidad angloparlante denominada popularmente “Barrio Jamaicano” del municipio Baraguá de Ciego de Ávila, se explica a partir del criterio de Rodríguez, Juan C. (1989), quien expone su constitución a partir de la llegada de braceros con el afán de encontrar mejores condiciones de vida y regresar a sus lugares de origen; hace énfasis en aspectos históricos y en la cultura de esa comunidad, a la que los autores prefieren designar como anglocaribeña por la diversidad de islas del Caribe en ella reunidas (Jamaica, Trinidad y Tobago, Santa Lucía, San Vicente, Antigua y Barbuda, Monserrat, Guadalupe, Granada, Gran Caimán, Barbados y Jamaica), cuya simbiosis ha ido conformando una idiosincrasia peculiar, basada en el respeto a sus modos de vida y sus tradiciones. Al respecto, Villarreal, D. (2000) afirma que los pobladores mantienen las tradiciones recibidas de sus ancestros (bailes, música, comidas, bebidas, manifestaciones culturales, fiestas e incluso, el idioma y considera que es un caso excepcional y único en el país, lo cual corrobora Cárdenas, L. (2020).

La defensa de sus valores, que lejos de desvirtuarse bajo la influencia del entorno cubano, ha significado una fuerte influencia sociocultural en el territorio y el resto del país, por su idiosincrasia, sus ricas tradiciones y su sello distintivo, a pesar de los múltiples rasgos de carácter étnico y socio-histórico.

Los referentes etnológicos de la comunidad se centran en sus habitantes, de raza negra y religiosidad cristiana. La idiosincrasia vista desde la esencia de cada individuo condiciona una conducta social conformada bajo la dirección de la figura patriarcal, tipifica una personalidad de elevado ego, que defiende la privacidad y el respeto a su cultura; el carácter afectivo, respetuoso y bondadoso dada su filiación cristiana, cuya diversidad de iglesias protestantes contribuyó a la formación conductual, coral y lingüística de los hijos y la “capacidad de transmitir mediante la oralidad el imaginario cultural del que son deudores, de inculcar el respeto a sus antepasados y el amor por la tradición en cada generación de descendientes. (Cárdenas, L. 2020)

La idiosincrasia adquiere formas peculiares de realización en otros aspectos como: la práctica permanente del idioma inglés, cuyas raíces datan de la colonización británica que ejercieron gran influencia en los pobladores jamaicanos y propiciaron frases y terminologías que contribuyeron al desarrollo del idioma en esa región del Caribe y se conservan en la comunicación cotidiana; una culinaria con atractivos platos derivados de la preferencia por la conservación y reproducción de frutos endémicos; la práctica de juegos tradicionales; la preferencia por una estética en la que prevalecen los tonos multicolores que evidencian la alegría de vivir; la creación y el placer por diferentes manifestaciones artísticas con genuinas expresiones folclóricas en la música, los cantos y las danzas.

Los factores de identidad esbozados han encontrado espacios de socialización que vigorizan la tradición comunitaria angloparlante con la participación de toda la comunidad baragüense: el Evento Gladys in Memoriam, la Gala del 31 de Julio (preámbulo de las festividades por el 1ro de agosto) y la fiesta del 1 de agosto, la más representativa, creada para celebrar la liberación de Las Antillas. En ellas se ponen de manifiesto, el conjunto de valores como la idiosincrasia acompañada de la representación artística de los factores que constituyen la base identitaria del que, varias décadas después, sería su representante cultural, “La Cinta”, de la cual la musicóloga Cárdenas, L. (2020) plantea que “el asentamiento y apego a las tradiciones legadas por los antepasados y la necesidad de mantenerlas vivas propiciaron la creación del Conjunto Músico Danzario La Cinta”, cuyos rasgos característicos se conservan “gracias al respeto por la herencia cultural que defienden”.

Elementos identitarios anglocaribeños en el conjunto músico danzario “La Cinta”

Los valores culturales de la comunidad anglocaribeña baragüense son la fuente patrimonial de identidad de “La Cinta”, desde su creación en 1966 como en 1975 que pasó a ser una agrupación músico - danzaria, bajo la dirección de Alonso Jordán, como resultado de la fusión del grupo musical “Calipso Boys”, agrupación musical y “La Cinta”, esta, en sus inicios no tenía en su repertorio coreografías ni figuras bien definidas. La decisión implicó una agrupación más completa, enriquecida con la incorporación de otros géneros musicales con un nuevo formato de Tug Band que garantizaba el acompañamiento a la ejecución danzaría con una música más fuerte y cadenciosa, un trabajo artístico más sólido para expresar el carisma típico del Caribe, relatado en los textos de sus canciones, que reproducen la vida social anglocaribeña desde sus ancestros, elementos naturales autóctonos y tradiciones culturales conservadas de generación en generación, cuya reproducción y técnicas de expresión garantizan un espectáculo de mayor lucidez.

Actualmente “La Cinta” cuenta con 8 mujeres y 14 hombres, de edades comprendidas entre 16 y 60 años, mayoritariamente jóvenes no descendientes procedentes del grupo infantil Caribbean Children, que traen consigo el afán por defender los ideales del Caribe que se unen por sus costumbres, tradiciones y sus ideales”. (Castellanos, I. 2015, p. 6), pero con escaso dominio de la lengua inglesa.

La música, interpretada esencialmente con instrumentos musicales de percusión (ver fig. 1,2,3,4) tales como el bombo y el redoblante, la tumbadora, el triángulo y el bongó, rige la ejecución de los bailes de acuerdo con la fuerza que se les imprime.

Figura 1. De izquierda a derecha: 1) Bombo y redoblante, 2) tumbadora, 3) triángulo, 4) bongó

La interpretación del calipso continúa formando parte esencial del espectáculo, pero fusionado con la música cubana para crear un estilo propio que ya forma parte de la identidad cultural cubana. Las danzas más representativas son:

Las coreográficas originarias del conjunto se mantienen hasta la actualidad poseen elementos enriquecedores que le aportan vida al espectáculo: el donkey (burrito), encargado de animar y dirigir las fiestas; los bailes incorporan juegos típicos: en saco, zarandas y zancos, ejecutados con gran habilidad y destreza; el vestuario de gran colorido y tonos llamativos y brillantes, cintas multicolores atadas a un palo que se tejen y destejen con habilidad, dinamismo y destreza. (Rolando, G., 1996)

La música determina un matiz distintivo en los pasos, movimientos, y una ejecución tradicional aprendida de sus familiares, un trabajo artístico más sólido que expresa el carisma típico del Caribe, relatados en los textos de sus canciones, que hablan sobre el amor a la pareja, el diario social, tanto personal como laboral y de sus elementos autóctonos como los personajes, las frutas y animales endémicos. En la interpretación se manifiesta el doble sentido, con gran picardía y jocosidad. Algunos instrumentos musicales utilizados en el acompañamiento musical:

El Conjunto “La Cinta” cuenta con 8 mujeres y 14 hombres, de edades comprendidas entre 16 y 60 años, mayoritariamente jóvenes no descendientes procedentes del grupo infantil Caribbean Children, aún se lamenta la ausencia de su único director descendiente, quien a pesar de sus más de 70 años bailaba ocasionalmente para realzar el espectáculo con su ejecución, como reflejo fiel de los sentimientos de la comunidad, la cual denota preocupación por “(…) la defensa de los ideales y de las propiedades de lo más genuino para representar cada lugar y cada país del Caribe que se unen por sus costumbres, tradiciones y sus ideales”. (Castellanos, I. 2015, p. 6).

Las coreográficas originarias del conjunto se mantienen en la actualidad, poseen elementos enriquecedores que le aportan vida al espectáculo como el donkey (burrito), encargado de animar y dirigir las fiestas; los bailes incorporan juegos típicos: en saco, zarandas y zancos, ejecutados con gran habilidad y destreza; el vestuario de gran colorido y tonos llamativos y brillantes, cintas multicolores atadas a un palo que se tejen y destejen con habilidad, dinamismo y destreza. (Rolando, G.,1996)

Una mirada a la labor cultural del conjunto músico danzario “La Cinta” permite aquilatar los éxitos alcanzados por su calidad artística y su defensa de la tradición anglocaribeña de la cual es portador, se le reconoce un lugar cimero como referente cultural en Cuba y el mundo y no solo en la comunidad anglocaribeña de Baraguá. (Anexo 1). No obstante, se aprecia que a partir de 2011 ha decrecido la visibilidad del conjunto y la participación en eventos. Mantener el reconocimiento social alcanzado en las nuevas circunstancias generacionales constituye un reto para los decisores de la formación y desarrollo del conjunto, los integrantes del elenco artístico y de la comunidad que representan, preservar su identidad cultural que lo sitúa en un lugar cimero.

Influencia de los cambios generacionales en los factores de identidad de la tradición anglocaribeña de “La Cinta”

Los cambios generacionales condicionados por el devenir histórico, significan el paso natural de una generación a otra cuyas expectativas difieren de sus antecesores y determinan modificaciones, tanto en la identidad personal que singulariza a cada individuo como en la social que vincula al individuo con la colectividad de la cual forma parte que lleva a la búsqueda de nuevas experiencias de vida. La comunidad anglocaribeña denominada Barrio jamaicano, ha sufrido la desaparición paulatina de los descendientes, que se convirtieron en trasmisores de su cultura para el desarrollo de “La Cinta”. Por otra parte, ha estado afectado por “un movimiento migratorio que de mantenerse, se corre el riesgo de perder las ricas tradiciones culturales que allí se manifiestan”. (Villarreal, D. 2000, p. 8).

Lo anterior se concreta en “La Cinta” en la composición étnica, el idioma y la cultura, factores de identidad decisivos en la asimilación y perdurabilidad de la tradición anglocaribeña que representa el proyecto a través de la música y la danza. Por otra parte, incide la fluencia de los integrantes del Conjunto y, en consecuencia, la incorporación sistemática de bailarines y músicos productos del mestizaje cultural, empíricos de formación, con limitaciones idiomáticas, la mayoría no angloparlantes (solo cuatro lo son) y carentes de referentes autóctonos de “El Barrio”, y en similar condición, la de otros, cubanos no descendientes cuya idiosincrasia es diferente. Todo lo cual se manifiesta, tanto en los modos de sentir, como de hacer, expresar y pensar e impacta en la creación artística con un sello y originalidad diferentes, aunque aún casi imperceptible para los inexpertos en el tema.

Otro factor de identidad a considerar es el idioma, cuya realización permite la interpretación de todo lo que acontece en la vida social y la garantía de perdurabilidad de los valores acumulados; su desconocimiento total o parcial tiene implicaciones en la comunicación.

En los éxitos de las primeras generaciones de “La Cinta”, dependieron en buena medida de la realización idiomática, porque sus integrantes eran descendientes, el inglés era su lengua materna, convivía en la comunidad y podían asimilar y reproducir los valores autóctonos, pero la composición generacional ha cambiado, en ella predominan los cubanos no convivientes en la comunidad, carentes de con conocimientos básicos adquiridos en la escuela regular, y si bien hay un esfuerzo por el intercambio y socialización en espacios de ensayos y actividades, es insuficiente la influencia idiomática que reciben los artistas de los angloparlantes, lo que limita su capacidad de comprensión, esencialmente de las variantes dialectales y funcionales como el patoi, que forman parte del léxico llevado a los cantos para designar los valores culturales tradicionales, asimilarlos, sentirlos como propios e interpretar sus esencias, de ahí los cambios en la correspondencia entre el texto de las canciones, lo que les sugiere el texto, la sensibilidad ante el hecho cultural, la fuerza que se imprime, tanto en la ejecución instrumental como en los movimientos corporales inherentes a la representación, cuyo espectáculo merma en autenticidad. Estos aspectos que avizoran la pérdida paulatina de autenticidad. Un ejemplo actual se manifiesta en la danza “Mulata en la pista”, donde se aprecia que danzan con una técnica depurada, al ritmo de una música que conserva las características originales y representan un tejido, pero se falta de correlación entre este y el texto de las canciones.

En la búsqueda del relevo para mantener viva la tradición de la comunidad angloparlante desde las generaciones más pequeñas, se creó un primer grupo infantil llamado Saril, que tuvo una corta duración. Luego, una de las bailarinas de “La Cinta” e instructora de la Casa de la Cultura, Barbara Campbell, fundó el grupo “Relevo”, que más tarde adoptó el nombre de “Los caribeñitos” y se convirtió en el grupo infantil más representativo de la provincia por su calidad artística, con disímiles premios en festivales de pioneros provinciales y un gran primer lugar en un festival nacional el país, pero una vez más el problema generacional hizo que al cambiar de enseñanza el grupo se dispersara. Otro bailarín de “La Cinta”, el instructor de arte Mario A. Arrieta, reorganiza el grupo bajo el nombre de Caribeña Children y logra junto a Beatriz de León, instructora de música, convertirlo nuevamente en un grupo de referencia provincial y nacional, invitado permanente a los festejos por el 1 de agosto.

Las reflexiones compartidas avizoran la pérdida paulatina de las esencias culturales anglocaribeñas que aportan identidad a “La Cinta”, se realizan alejada de la crítica; debe promover acciones formativas en atención a los aspectos abordados, un reto para decisores, especialistas, la comunidad angloparlante baragüense, en coordinación con la universidad.

CONCLUSIONES

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

CÁRDENAS, L. (2020). La Cinta. Presencia del Caribe anglófono en suelo cubano. Disponible en: https://cidmucmusicacubana.wordpress.com/2020/06/24/la-cinta-presencia-del-caribe-anglofono-en-suelo-cubano/ Visitado junio de 2022.

CASTELLANOS JORDÁN, I. (2015). Dossier del Grupo Músico Danzario La Cinta. Dirección Prov. de Cultura, Ciego de Ávila, 2015. Disponible en: http://www.ciego.cult.cu/portada/2015/10/01/dossier-del-grupo-musico-danzario-la-cinta/ Visitado: mayo de 2022.

CASSIDY, Frederic G. (1961). Jamaica Talk: Three Hundred Years of the English Language in Jamaica.

Concepto Identidad cultural. (2022). Disponible en: https://es.wikipedia.org/wiki/Identidad_cultural Visitado mayo de 2022.

Conjunto folklórico La Cinta, promotor de tradiciones caribeñas en Cuba. (video), 2017. Disponible en: Visitado abril de 2022.

¿Cuáles son los factores que influyen en la identidad? (2020). Disponible en: https://organosdepalencia.com/biblioteca/articulo/read/112043-cuales-son-los-factores-que-influyen-en-la-identidad#question-0 Visitado junio de 2022.

CÓRDOVA OTERO, A. (2019). El patrimonio danzario desde una perspectiva vivencial. Periódico Cubarte, 13 jul.

Definición de antropología cultural. En Wikipedia. Disponible en: https://es.wikipedia.org/wiki/Identidad_cultural Visitado mayo de 2022.

GÓMEZ AGUILERA, A. M., ROJAS RAMÍREZ, G. y LEÓN MARTÍNEZ, V. (2018). Cultura e Identidad. Debates actuales. Revista Caribeña de Ciencias Sociales, enero 2018. Disponible en: http://www.eumed.ned/rev/caribe/2018/01/cultura-identidad.html Visitado abril de 2022. Visitado: mayo de 2022.

RODRÍGUEZ GONZÁLEZ, J. C. (1989). Monografía cultural del municipio Baraguá. Dir. Provincial de Cultura, Ciego de Ávila, (Manuscrito).

ROLANDO, G. (1996). Documental Los hijos de Baraguá. Mundo Latino.

VILLARREAL BENCOMO, D. (2000). Estudio sobre el barrio jamaiquino de Baraguá. Comunidad de tradiciones culturales únicas en Cuba. CITMA, Ciego de Ávila.

Anexos

ANEXO 1

PRINCIPALES RECONOCIMIENTOS DE “LA CINTA”

Agrupación destacada en el XI Festival de la Juventud y los Estudiantes (1978), Orden al Mérito Artístico, (otorgado por el Ministerio de Cultura, 1982 y 1986), Diploma por la conservación y difusión de las tradiciones (Ministerio de Cultura, 1990), Premio Memoria Viva (Centro de Investigaciones de la Cultura Juan Marinello,1994), Premio Juan Marinello (1998), Premio Nacional de Cultura Comunitaria (Centro Nacional de Cultura Comunitaria, 2001), Premio El Barrio (Dirección nacional de los CDR), Diploma especial por la labor destacada en el Encuentro Nacional sobre Cultura Popular Tradicional (Consejo Nacional de Casas de Cultura 2003), Premio Empaca (Casa del Caribe en Santiago de Cuba, 1994, 2005 y 2007), Reconocimiento Especial Internacional de Los Pirineos (Francia, 2004), Premio Internacional a la Excelencia (Ayuntamiento de Punta Umbría en España, 2004) Diploma por el rescate y conservación del patrimonio cultural de nuestros pueblos (CIOFF, 2005), Reconocimiento Especial “Fiel exponente de la Cultura Popular Tradicional en el país (Dirección provincial de Cultura en Villa Clara, 2006, Distinción José María Heredia (Casa del Caribe en Santiago de Cuba, 2007), Distinción por la Conservación de las Tradiciones (Ministro de Cultura, 2011)

Tori, C., Jordan, L. y Arzola, L. (2022). Los cambios generacionales en la identidad anglocaribeña del conjunto La Cinta y su expresión artística. Universidad & ciencia, Ciego de Ávila, Vol. 11, No. 3, pp. 219-230.